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EL FUTURO DEL TRABAJO Y LA HIPERCONECTIVIDAD
Posteado el 30/06/16 a las 2:01 pm por Candini y Asoc Estudio

Esto, sin lugar a dudas, es una tendencia que también se ha expandido a la vida laboral de los trabajadores, quienes gracias a las diversas herramientas disponibles pueden controlar prácticamente todo desde sus tablets, notebooks, computadoras y celulares. Estar invariablemente accesible y contar en todo momento con la información minuto a minuto, ya sea a través del mail, los chats, o el acceso directo los distintos portales, o a nuestros propios documentos -desde cualquier lugar y en cualquier momento-, se ha convertido en casi una obligación, tanto para los profesionales como Administrativos actuales. Hoy por hoy, son comunesmodalidades de teletrabajo o trabajo flexible y colaborativo, siendo un punto importante que la órbita del empleador se extienda a otras modalidades de contrato fuera del tradicional empleado fijo, a tiempo completo y con presencia regular en la oficina.  Especialistas en la materia, sostienen que estamos entrando en una nueva revolución industrial, y que como podemos imaginar tendrá su impacto en el ámbito laboral. Queda claro que las innovaciones tecnológicas, como la telefonía celular, las videoconferencias, el correo electrónico, los mensajes de texto y las redes sociales, han traído nuevas vías y oportunidades de comunicación en tiempo real. La hiperconectividad conforma un esquema que permite acceder en forma amplísima a un insumo primordial que es la información. Un informe de la Universidad de Monterrey señala que: “La tendencia más generalizada es el cambio en las formas de trabajo como resultado de las nuevas funcionalidades que ofrece la tecnología. La extraordinaria capacidad de la tecnología para crear relaciones virtuales y “líquidas” (que se conforman o disuelven en la medida en que se comparte un interés común) y los nuevos desarrollos móviles y en la nube se traducen en el auge en la creación de nuevas alianzas entre organizaciones para el desarrollo de proyectos concretos”. Si la hiperconectividad no es tratada con cuidado, este supuesto acceso a la información podría ser un problema, ya que los rendimientos de cualquier persona tenderán a ser decrecientes en la medida en que se encuentre saturado. Otro de los inconvenientes de esta nueva forma de trabajo es el sedentarismo al que se someten los profesionales y la dependencia excesiva de Internet, situación que se pone de relevo ante un colapso del sistema o ante desperfectos del mismo. Ahora bien, si la tecnología es bien utilizada, beneficia en términos de tiempo, en búsqueda y acceso a la información, y facilita sobremanera la comunicación con otras personas de la organización. Todo esto hace necesario un agiornamiento de la legislación laboral acorde a los avances de la tecnología. La globalización ha puesto en marcha este mecanismo que se irá expandiendo en el mundo del Derecho Laboral. En el mientras tanto, será la propia organización y, en particular, el área de recursos humanos, las que deberán preocuparse de respetar el tiempo libre o de descanso de los empleados, y evitar por ejemplo enviar correos el fin de semana, a menos que sea absolutamente necesario, y a la vez, generar sistemas de comunicación que no dependan exclusivamente de Internet.  

El futuro del trabajo y la hiperconectividad

La hiperconectividad no sólo ha sido utilizada en la cotidianeidad de la vida diaria, hoy en día es casi normal ver como la gente camina por la calle con sus teléfonos en mano, casi abstraída del contexto que los rodea. Esto, sin lugar a dudas, es una tendencia que también se ha expandido a la vida laboral de los trabajadores, quienes gracias a las diversas herramientas disponibles puedan controlar prácticamente todo desde sus tablets, notebooks, computadoras y celulares.

Estar permanentemente accesible y contar en todo momento con información pertinente (mails, chats, etc), se ha convertido en toda una obligación para los profesionales / Administrativos actuales.

Hoy por hoy, la órbita del empleo se extiende a otras modalidades de contratación o fuera del tradicional al Empleado fijo, a tiempo completo y con presencia regular en la oficina. 

Estamos entrando en una nueva revolución industrial (la cuarta, tras las originadas por la máquina de vapor, la electricidad y la computerización). Los motores de cambio en esta ocasión son la inteligencia artificial y la hiperconectividad, y como podemos imaginar el impacto previsto en el ámbito laboral es extenso y profundo, aunque se manifestará de forma diferente en las distintas regiones del mundo.

Sin duda, las innovaciones tecnológicas, como la telefonía celular, las videoconferencias, el correo electrónico, los mensajes de texto y las redes sociales, han traído nuevas vías y oportunidades de comunicación en tiempo real.

 Por otra parte, a esta revolución tecnológica debemos sumar importantes cambios sociales que están produciéndose de forma paralela. “La hiperconectividad conforma un esquema que permite acceder en forma amplísima a un insumo primordial que es la información. Parecería acercarse mucho a la definición de paraíso”, explica Antonio J. Dieck, rector de la

 Universidad de Monterrey

El informe señala que la tendencia más generalizada es el cambio en las formas de trabajo como resultado de las nuevas funcionalidades que ofrece la tecnología. Además de la futura extensión y evolución de las modalidades de teletrabajo o trabajo flexible y colaborativo, un punto importante es que la órbita del empleador se extiende para acoger otras modalidades de contrato fuera del tradicional empleado fijo, a tiempo completo y con presencia regular en la oficina.

La extraordinaria capacidad de la tecnología para crear relaciones virtuales y “líquidas” (que se conforman o disuelven en la medida en que se comparte un interés común) y los nuevos desarrollos móviles y en la nube se traducen en el auge en la creación de nuevas alianzas entre organizaciones para el desarrollo de proyectos concretos. Obviamente, la velocidad de adopción dependerá de las condiciones regulatorias y de negocios de cada sociedad, pero la globalización ha puesto en marcha este mecanismo con fuerza y veremos cada vez más ejemplos de estos nuevos modelos de empleo.aquello que pudiera parecer la panacea, puede revertirse si no se establecen límites prudentes. “Si la hiperconectividad no es tratada con cuidado, este supuesto acceso a la información podría ser un problema. Es bien conocido que llegados a un óptimo, los rendimientos de cualquier persona tenderán a ser decrecientes en la medida en que se encuentre saturado”,

En este contexto, y siguiendo siempre los datos del informe, se espera un dramático descenso de los puestos de trabajo, específicamente en el segmento de administrativos y de oficina, y un crecimiento (aunque mucho menor) de profesiones basadas en informática, matemáticas e ingenierías. 

Estar permanentemente accesible, se ha convertido en toda una obligación para los empleados. Sin embargo, lo que para muchos es una panacea, puede llegar a tener efectos contrarios si no se establecen límites prudentes. La hiperconectividad constituye quizá el símbolo más nítido de la globalización. El salto tecnológico que significó el uso masivo de Internet y su consecuente impacto en el mundo de las comunicaciones determinó -en una era donde, además, desde la perspectiva económica se instauraba un auge de la apertura comercial- que las fronteras se difuminaran y que las dimensiones de tiempo y espacio perdieran relevancia.

Según el académico, el trabajador hiperconectado debe gozar de una habilidad de discernimiento que le permita encontrar, entre cúmulos de datos, aquellos que resulten verdaderamente relevantes para la información que busca. Por ello, resultará de mucha ayuda una adecuada selección de las fuentes, sobre todo en la medida en que dicha selectividad se convierta en una garantía de veracidad. 

la hiperconectividad bien utilizada beneficia en términos de tiempo, en la búsqueda de información y en la comunicación con otras personas de la organización, muchas veces, puede “producir una mayor exigencia, ya que las personas esperan que sus correos sean respondidos de forma inmediata y por lo general se molestan si hay demora en la respuesta”.

Como inconvenientes de esta nueva forma de trabajo, destacan, además, el sedentarismo al que se someten los profesionales y la dependencia excesiva de Internet, algo que provoca un colapso en la organización cuando el sistema se cae o deja de funcionar.  Y agrega que incluso, “se ha vuelto reprobable que una persona se desconecte o no cuente con Internet o Blackberry.

Controlando el fenómeno. Para controlar la hiperconectividad entre los empleados, algunas empresas bloquean el acceso a determinados sitios web, con el fin de que se centren en el trabajo y no se distraigan en asuntos personales. Si bien esta opción evita, en alguna medida, que se pierda tiempo, muchas veces puede producir resentimiento y la sensación de estar en un sistema organizacional demasiado paternalista. 

“La productividad es mejor cuando se funciona por metas y la gestión del tiempo es personal. Cuando hay muchas restricciones eso inevitablemente tiene un efecto negativo a largo plazo”, dice Pérez.

Guillermo Bustamante, profesor de Medios Digitales de la Universidad Mayorde Chile explica que “el multitasking es una realidad que nadie puede negar, lo importante es lograr que esté en función de la compañía. Bloquear aplicaciones y sitios no es lo óptimo, pero orientarlos al trabajo sí”. 

Según el académico, el hábito de los profesionales de revisar Facebook y otros social media para buscar clientes y generar contenidos, puede llegar a ser un gran aporte para la compañía. Por ello, recomienda aprovechar el fenómeno capacitando a los empleados. “La capacitación y actualización de los trabajadores de la empresa en estas materias es primordial para poder sacarle el mayor provecho a la empresa”, asegura.

Más allá del constante uso de las nuevas tecnologías durante la jornada laboral, la hiperconectividad en el trabajo no sólo dependerá de la persona, sino más bien de las exigencias impuestas sobre ella. Mientras existen empresas en las que se espera que el empleado esté conectado las 24 horas del día, hay otras en donde la utilización de estas herramientas tecnológicas serán prohibidas y sancionadas. 

La propia organización y, en particular, el área de recursos humanos y jefaturas, serán las que deberán preocuparse de respetar el tiempo libre o de descanso de los empleados, y evitar por ejemplo enviar correos el fin de semana, a menos que sea absolutamente necesario, y a la vez, generar sistemas de comunicación que no dependan exclusivamente de Internet.

HIPERCONECTIVIDAD LABORAL

Con el desarrollo actual de las TIC, millones de individuos poseen un dispositivo móvil que le permite estar en contacto permanente. 

¿Hasta qué punto la hiperconectividad no está desplazando la comunicación humana, para imponer el modo de comunicación "de los aparatos"? 
El hombre creó los dispositivos...¿los dispositivos determinarán al hombre?

Muchas empresas buscan controlar el fenómeno de la hiperconectividad entre los empelados. para esto, bloquean el acceso a ciertas páginas y así evitan que los empleados se entretengan con asuntos personales en el horario laboral. Si bien esta opción evita, en alguna medida, que se pierda tiempo, muchas veces puede producir resentimiento y la sensación de estar en un sistema organizacional demasiado paternalista.

Además, algunas páginas que pueden parecer de uso personal pueden servir para fines laborales. Como por ejemplo el uso de facebook para buscar clientes y generar contenidos. Por ello, muchas veces se recomienda aprovechar el fenómeno capacitando a los empleados. La capacitación y actualización de los trabajadores de la empresa en estas materias es primordial para poder sacarle el mayor provecho a la empresa.

Más allá del constante uso de las nuevas tecnologías durante la jornada laboral, muchas veces la hiperconectividad en el trabajo no sólo dependerá de la persona, sino más bien de las exigencias impuestas sobre ella o las políticas de la empresa. Mientras existen empresas en las que se espera que el empleado esté conectado las 24 horas del día, hay otras en donde la utilización de estas herramientas tecnológicas serán prohibidas y sancionadas.

La propia organización y, en particular, el área de recursos humanos y jefaturas, serán las que deberán preocuparse de respetar el tiempo libre o de descanso de los empleados, y evitar por ejemplo enviar correos el fin de semana, a menos que sea absolutamente necesario, y a la vez, generar sistemas de comunicación que no dependan exclusivamente de Internet.


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